Así como las grandes bandas de rock a veces echan mano de músicos «hired guns» (músicos contratados para tocar en giras), los analistas de los Centros de Operaciones de Ciberseguridad (SOC) son los héroes invisibles detrás del éxito de los líderes de seguridad (CISO).
Son ellos quienes, en el día a día, manejan una abrumadora cantidad de alertas e incidentes que podrían poner en jaque la operación de una organización. Y también son estos analistas quienes enfrentan constantemente el agotamiento y la presión de un entorno laboral cada vez más demandante.
En los años recientes, el panorama laboral en ciberseguridad ha tenido cambios evidentes. Los analistas del SOC son más solicitados que nunca y se les ofrece mejores salarios y ofertas laborales más atractivas. A esto se suma una nueva generación de trabajadores que valora el equilibrio entre la vida personal y profesional.
La rotación es alta, y retener talento se ha vuelto un desafío para los líderes de ciberseguridad. Pero, ¿cómo pueden las organizaciones mantener a estos profesionales comprometidos en sus filas?
Humanizar al analista: más que un técnico
Es fundamental entender que los analistas no son solamente el talento técnico dentro de un sistema. Son personas con aspiraciones, preocupaciones y, en algunos casos, pueden verse tentados por ofertas externas o verse sobrepasados por la presión diaria. Para evitar que el agotamiento los lleve a abandonar el barco, las organizaciones deben implementar estrategias que no solo los motiven, sino que también humanicen su experiencia laboral.
A continuación, se detallan seis estrategias clave:
- Automatización del triaje de alertas. El flujo de alertas en un SOC es constante, y muchas de ellas requieren análisis rápidos pero repetitivos. Un error en esta etapa puede hacer que se pase por alto una amenaza crítica. Aquí es donde entra la automatización. Al igual que un hospital prioriza a sus pacientes en función de la gravedad, el triaje automatizado puede priorizar las alertas, permitiendo que los analistas se enfoquen en las amenazas más serias sin perder tiempo en las triviales.
- Inteligencia artificial al servicio de los analistas. El miedo a que la IA reemplace a los analistas de SOC es infundado. Lo que realmente está ocurriendo es una potenciación del trabajo humano. La inteligencia artificial puede encargarse del 90% de las alertas de nivel uno, liberando a los analistas de tareas repetitivas. En lugar de estar revisando cada alerta, los analistas pueden enfocarse en revisar los resultados generados por la IA, elevando así su papel a uno más estratégico.
- Cambiar la naturaleza de trabajo del analista. Uno de los grandes beneficios de la automatización es que permite a los analistas dedicarse a tareas de mayor valor. Pasan de realizar análisis repetitivo a tomar decisiones estratégicas y desarrollar habilidades más avanzadas. Este cambio no solo mejora su satisfacción laboral, sino que también los posiciona como piezas clave en la organización y explorar su potencial.
- Acelerar la respuesta ante un ataque. En un SOC, una reacción rápida puede hacer la diferencia entre contener una amenaza o sufrir una brecha de seguridad. Las tecnologías como SOAR (orquestación, automatización y respuesta de seguridad) permiten que las respuestas se implementen de manera automática y rápida, liberando a los analistas para que se concentren en la estrategia de contención y protección.
- Educación continua del talento. Uno de los mayores incentivos para los analistas de ciberseguridad es el desarrollo profesional constante. Invertir en certificaciones, capacitación y formación técnica avanzada no solo beneficia a la organización, sino que también crea un sentido de pertenencia en los analistas. Sentir que la empresa está comprometida con su crecimiento profesional puede ser la clave para evitar que busquen oportunidades fuera.
- Mejorar la integración de herramientas. La integración eficiente de herramientas como SOAR, SIEM y otros sistemas de ciberseguridad reduce la carga de trabajo de los analistas, haciéndolo más fluido y menos repetitivo. Con chatbots y copilotos, las búsquedas de amenazas se hacen más rápidas, y los analistas pueden tomar decisiones más informadas sin perderse en el mar de datos.
En Minsait estamos implementando SOAR para todos nuestros clientes, independientemente de su tamaño o madurez. A través de nuestra plataforma tecnológica, automatizamos la respuesta a ataques, conectándonos con sus tecnologías. Esto permite una reacción rápida y eficiente, fundamental para la protección y contención en momentos de crisis.
Un entorno de trabajo equilibrado
En un ambiente donde los analistas de SOC deben estar disponibles 24/7, es fundamental que las empresas fomenten el equilibrio entre la vida personal y laboral. Herramientas de comunicación eficientes, como Slack o Microsoft Teams, pueden facilitar la colaboración en tiempo real y reducir el estrés causado por la alta demanda. A largo plazo, promover un ambiente de trabajo equilibrado puede ser la clave para la retención.
Reconocer el trabajo duro de los analistas no es solo una buena práctica, es una necesidad. A menudo, los analistas pasan desapercibidos, pero su esfuerzo es lo que mantiene a las organizaciones a salvo de amenazas. Implementar incentivos, tanto monetarios como no monetarios, puede ser un excelente motivador para que los analistas sigan comprometidos.
Mejor comunicación y bienestar
En los SOC debe fomentarse un entorno donde la colaboración sea clave. No sólo entre analistas, sino también entre diferentes departamentos. Al mejorar la comunicación interna y las dinámicas de equipo, las organizaciones pueden garantizar que todos los miembros del SOC se sientan apoyados y valorados.
Es esencial que las organizaciones no solo se enfoquen en el trabajo técnico, sino también en el bienestar general de sus empleados. Ofrecer horarios flexibles, días de descanso y actividades que fomenten la desconexión del trabajo puede contribuir a evitar el agotamiento de los analistas.
Humanizar a los analistas de ciberseguridad no es solo una cuestión de liderazgo efectivo, es una necesidad en el actual entorno. Implementar estrategias que incluyan automatización, desarrollo profesional continuo, equilibrio entre trabajo y vida personal, y un entorno de trabajo colaborativo no solo mejorará la retención de talento, sino que también elevará la calidad de los servicios de ciberseguridad. Las organizaciones que se enfoquen en el bienestar de sus analistas verán un impacto positivo en la eficiencia operativa y en su capacidad para enfrentar amenazas cada vez más complejas.